Tras el intento de cierre definitivo de las urgencias y gracias a la presión ciudadana, la Consejería de Sanidad anunció a finales de agosto que reabriría 78 Puntos de Atención Continuada (PAC), los mismos existentes de forma previa a la pandemia: 41 antiguos SAR (Servicios de Atención Rural) y 37 SUAP (urgencias situadas en centros de salud urbanos). Este anuncio que está todavía a la espera de ser una realidad, tiene, como siempre en las acciones del gobierno de Ayuso, letra pequeña.
Porque la Comunidad de Madrid pretender abrir todos esos centros, es decir recurriendo exclusivamente a los profesionales que actualmente están trabajando en los SAR con casi la mitad de efectivos que los existentes de forma previa al estallido de la pandemia. Sin duda, un ejemplo más de la política de trileros que es habitual en el gobierno de Ayuso.
Esta reducción encubierta, que se suma al resto de los recortes, aplazamientos y mantenimiento de carencias en nuestro modelo de Sanidad, no son más que la demostración práctica del plan de los populares para desmantelar y privatizar la Sanidad Pública en Madrid.
Por ello, las y los socialistas de Pinto seguiremos:
• Exigiendo el inicio inmediato de la construcción del tercer Centro de Salud de la Tenería.
• Reclamando el incremento de plantillas para poder reducir las listas de espera y la mejora de las condiciones laborales del personal sanitario
• Demandando la reapertura inmediata de las urgencias en el Centro de Salud de Pinto, sin retirar personal de otros servicios.
Ayuso pretende imponer sus medidas de forma unilateral, al margen de la negociación habitual con las Organizaciones Sindicales de la Mesa Sectorial que obviamente se oponen de forma unánime a esta última maniobra de la Consejería.
La Sanidad Madrileña se ha convertido para Ayuso en un truco de una maga chapucera, donde únicamente desplaza caprichosamente los profesionales de unos centros a otros, para esconder así la ausencia de lo que verdaderamente necesita la Comunidad de Madrid: un impulso en la financiación de la Sanidad Pública y un claro refuerzo de Recursos Humanos en las Urgencias Extrahospitalarias.